Una vida entre llamas

Nota informativa

Con tan solo cuatro añitos, la niña Margarita supo que quería ser de grande y que haría con su vida, y todo gracias a una visita a la estación de Bomberos de Los Angeles Ca.

Fué en el año de 1997 cuando la niña Margarita hizo una excursión a la estación de bomberos que cambiaría su vida.

Ella no tenía expectativa alguna al dirigirse a ese lugar, de hecho ni siquiera sabía bien cuales eran las funciones de un bombero, no fué sino hasta llegar ahí que se dió cuenta de que era algo que le llamaba la atención, algo que de grande podría hacer.

En ese lugar aprendió lo más básico pero lo más interesante, se le instrudó que hacer si ella o alguno de sus compañeritos alguna ves se prendia en fuego, se le enseñó el número de emergencias y el uso del extintor.  Al final se les dejo deslisarse por el tubo a todos los niños y niñas, y ella fué afortunada porque se le permitió tomarse una foto con el uniforme de bomberos.

Nadié en su familia tenía idea de cuan grande había sido el impacto de esta visita en la pequeña, "Yo nunca me hubiera imaginado que ella quisiera ser bombero" nos dice su madre en una entrevista realizada, "Mi hermana está loca, como cree que será bombero, eso es de hombres, además no tiene la capacidad" nos menciona el hermano de Margarita.

Sean cuales sean las opiniones a Margarita no le importa, pues como ella nos dice "No es algo que estudias o haces, es algo que eres ... Quieran o no luchare por lo que quiero hacer y lo lograré".

Esta historia sigue sin tener un final escrito, y no importa el descenlace, sino que esté felíz y le guste lo que haga, ya sea Dr., Ing., etc.

Buena suerte y buena guardia.